El gijonés hizo su primer entrenamiento en carretera tras la caída en la Volta a Catalunya y espera reaparecer a finales de mayo
Dani Navarro está de vuelta. El gijonés, pese a que aún tiene ligeras molestias tras su caída en la Volta a Catalunya, en la que se fracturó la escápula y rótula izquierdas, dio un paso al frente al dejar el rodillo y realizar un buen entrenamiento de cuatro horas por las carreteras asturianas. «Estoy contento porque tuve muy buenas sensaciones, tengo menos dolor, puedo volver a entrenar con bastante normalidad y estamos a tiempo de llegar en buena forma para el Tour de Francia. Ha sido un buen día», comenta con satisfacción el ciclista del Cofidis.
Semanas atrás las palabras del gijonés eran bien opuestas. Dani Navarro ha pasado un pequeño calvario, con dos caídas casi consecutivas que han trastocado sus planes, pero el gijonés, que no era optimista entonces, ha recuperado la sonrisa en su rostro. Ahora, verá modificada su hoja de ruta y cambiará los días de competición perdidos por un exhaustivo entrenamiento que le haga recuperar el tiempo perdido para llegar en las mejores condiciones a la cita francesa, en donde tiene fijado su gran objetivo de la temporada.
El gijonés realizará una concentración especial de veinte días. Aún resta por conocer el destino, pero todo hace indicar que una de las mejores opciones que baraja se sitúa en Sierra Nevada. El ciclista del Cofidis no quiere correr más improvistos y partirá hacia el sur de España para preparar su regreso a la competición. Habrá que esperar a finales de mayo para ver a Dani Navarro de nuevo en acción.
El gijonés tiene previsto competir en dos carreras de un día en la Bretaña francesa para, posteriormente, tomar parte de la Dauphiné, en donde se dan cita todas las primeras espadas del pelotón internacional. «Hay que hacer una buena base, necesito mucho volumen y muchas horas de entrenamiento para suplir los días de competición», argumenta el corredor. La luz al final del túnel cada vez está más cercana para Dani Navarro.
Dani BLANCO. La Nueva España - 29.04.2015